Nuevo año, nuevos propósitos
Un nuevo año comienza y con él nuevas ilusiones, sueños y sobre todo intenciones y propósitos.
Entre los más comunes se encuentran: dejar de fumar, perder peso, hacer ejercicio, aprender un idioma, viajar, otros como encontrar pareja, trabajo, etc.
Todos ellos se formulan con gran motivación y ganas; total, tenemos 365 días por delante para cumplirlos… Unos ni se empiezan, se quedan en ese «Este año voy a…» mientras que muchos otros se inician con muchas ganas, pero poco a poco se van desinflando como un globo, lo que en ocasiones va acompañado de sentimientos de culpa y/o fracaso.
Para que esto no ocurra, debemos fijarnos objetivos que sabemos que vamos a poder cumplir. Esto conlleva tomarse un tiempo con uno mismo, observar nuestras limitaciones, ser sincero, coherente y proponerse objetivos que sean posibles de cumplir de acuerdo a nosotros mismos. Empezar con propósitos sencillos y a corto plazo, que harán que al lograrlos nos hagan sentir bien por haberlos cumplido y nos motiven a continuar.
Otra cosa importante a tener en cuenta es no hacer listas de propósitos interminables, porque sería tal la dispersión, que al final la lista acabaría en un cajón junto a la de años anteriores: es mejor tener pocos objetivos, pero realistas y alcanzables.
Enfoca tus objetivos para este año desde nueva perspectiva
Si aún no tienes los tuyos, te propongo otro tipo de propósitos para el cuerpo, la mente y un año lleno de armonía, equilibrio y bienestar: rodearte de personas que te hagan sentir bien, compartir, reir, disfrutar de la naturaleza, bailar, atender a tu cuerpo, sacar tu niño/a interior, ser amable, agradecer, no preocuparte sino ocuparte, respetarte y respetar, amarte y amar…
Quizás después de leer esto, alguien decida cambiar o incluir en su lista propósitos más conscientes y directos al alma. A cumplirlos…
Muchísima razón… gracias!
Precioso artículo y muy útil, gracias!!
Cuanta realidad hay en tu artículo. Tomo nota y a ver si consigo hacer algo de lo mucho que me haría falta llevar a cabo. Un beso grande.